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Atmosfera
La Contaminación Atmosférica
Las características naturales de localización, las condiciones climáticas (como el régimen de vientos) y sobre todo, las actividades productivas existentes (con apenas industrias contaminantes), hacen que en la ciudad de Melilla no se superen los valores admisibles de calidad de aire para la salud humana.
En Melilla encontramos tres fuentes de emisión: una emisión difusa debido principalmente al tráfico rodado, y una segunda categoría que engloba a dos focos puntuales de emisión: la planta incineradora de residuos y la central eléctrica. El conjunto de las tres fuentes no tiene una incidencia significativa sobre la calidad del aire de la ciudad, lo que no quiere decir, que no haya problemas detectados y posibilidades de mejora.
Sobre la primera fuente de emisión, hay que destacar que el parque automovilístico de la ciudad es excesivo con relación a la población de la ciudad, así como la utilización del vehículo. En Melilla se matricularon en 2004 un total de 3201 vehículos, 313 más que en el año anterior.
En el siguiente gráfico podemos comprobar que Melilla se encuentra en el segundo nivel de ciudades españolas en cuanto a mayor número de vehículos por mil habitantes, situándose en la franja de 601-650. En cuanto a números de vehículos por hogar también se encuentra en el segundo nivel, entre 1,4-1,7.
GRÁFICO 1: Parque de vehículos por cada 1.000 habitantes. 2004
FUENTE: www.ine.es
GRÁFICO 2: Número de turismos por hogar. 2003
FUENTE: www.ine.es
En cuanto a la emisión de la planta incineradora y de la central eléctrica, las emisiones anuales correspondientes al año 2005 no superan los límites legales establecidos.
Con respecto a la inmisión, hay que señalar que Melilla no dispone de estaciones fijas ni permanente para medir la calidad del aire. Sí se realizan Campañas de Medición de la Calidad del aire, con instrumentación propia del Ministerio de Medio Ambiente. Las dos últimas campañas se hicieron en 1999 y en 2005.
En este último análisis se situaron laboratorios móviles en tres zonas de la ciudad: Parque Hernández, Pinares de Rostrogordo y Aeropuerto, tomándose medidas del dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno, monóxido de carbono, partículas (PM10 y PM2,5), ozono, benceno, tolueno y xileno-btx. El análisis de este último informe muestra que la calidad del aire en Melilla es adecuada. En el caso de los contaminantes gaseosos (SO2, óxidos de nitrógeno, benceno, CO y O3), los valores se encuentran muy por debajo de los valores legales de aplicación detectándose incluso, disminución de los valores respecto a las mediciones realizadas en 1999 como resultado de la mejora de los combustibles y del parque automovilístico, principal fuente de emisión en la ciudad, junto a la central térmica. En el especial caso de las partículas, se ha constatado la importancia del aporte natural a las concentraciones medidas de este contaminante, puesto que coinciden los valores de mayor concentración con los correspondientes a las intrusiones saharianas.
En los gráficos siguientes podemos observar los niveles de dióxido de azufre y de benceno obtenidos en las tres zonas de medida. Ambos están muy por debajo de los valores límites requeridos.
GRÁFICO 3: Niveles de benceno. 2005
FUENTE: Ministerio de Medio Ambiente, 2005.
GRÁFICO 4: Niveles de dióxido de azufre. 2005
FUENTE: Ministerio de Medio Ambiente, 2005.
La Contaminación Acústica
El conocimiento de los niveles de ruidos de la ciudad de Melilla es insuficiente, ya que no se ha elaborado ningún mapa sonoro basado en mediciones sistemáticas de las diferentes áreas urbanas en diversas franjas y días de la semana.
No obstante, en el informe sobre la evaluación medioambiental de Melilla de 2003, se afirma que las principales fuentes emisoras son: el tráfico rodado, el aeropuerto, la planta de producción de energía y la planta incineradora de residuos.
El aeropuerto, al no tener un tráfico excesivo y no funcionar por la noche, no está considerado como una zona muy ruidosa. En la planta de producción de energía, los resultados de las mediciones realizadas en 2003 estaban por debajo de los niveles permitidos, aunque muy próximos al límite, además hay que tener en cuenta que la planta está ubicada próxima a la zona céntrica.
En cuanto al tráfico rodado, la zona más ruidosa es la que va del puerto marítimo al paso fronterizo de Beni-Enzar que tiene una intensidad media de tráfico elevada, alcanzando durante la jornada matinal un nivel considerable.
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